Por mucho que lo uses, si no tienes conocimientos técnicos de mecánica, es probable que no sepas cuáles son los tipos de embragues que hay. Claro, tampoco se trata de una cantidad demasiado grande de estos, por lo que puedes aprender cuáles son y también como funcionan. Veamos un poco más de este tema.
Para que el coche funcione correctamente, también debe hacerlo el embrague. De lo contrario te será muy difícil conseguir que se realicen los cambios de velocidad para una correcta marcha. Todo esto podría desencadenar en un daño de la caja de cambios o del motor. Así que puedes acudir a Tallerbarato.com para resolver cualquier problema del embrague.
Cuáles son los tipos de embragues
Lo primero que se debe conocer es el funcionamiento de esta pieza tan importante del coche. La misma se encarga de acoplar el motor con la caja de cambio, para lo que cuenta con una serie de discos. Mediante el volante motor se realiza el acoplamiento cuando se presione el pedal del embrague.
Esto da como resultado que se produzca un gran desgaste en esta pieza y que el motor ocasione que deba ser cambiado después de mucho uso. La mayoría de los mismos funciona por medio de fricción. Con lo que se puede transmitir la fuerza del motor a las ruedas del coche.
Por ello se puede encontrar distintos tipos de embragues, según distintas categorías.
Tipos de embrague por la cantidad de discos
La mayoría de los embragues usan disco para realizar el acoplamiento, pero no siempre tienen la misma cantidad.
Hidráulico: como su mismo nombre lo indica, este funciona por medio de un fluido, que ejerce la presión para activar el embrague. Sin embargo, este no posee discos, así que podría decirse que este es el primer tipo de embrague por número de discos.
Monódicos: como su mismo nombre lo indica, este es un embrague que no solo posee un disco, y es el mas usado en los coches convencionales.
Bidiscos: consta de dos discos que se acoplan entre sí para lograr que el coche pueda realizar los cambios.
Tipos de embrague por su refrigeración
Por la fricción, los embragues sufren mucho por el calentamiento, por lo que estos deben contar con un sistema de refrigeración, y puede ser distinto a los otros.
Secos: Estos se refrigeran por medio del aire que corre por el mecanismo del coche cuando este se encuentra en movimiento.
Húmedos: estos usan un tipo de aceite para refrigerarse, por lo que se debe revisar el nivel de aceite constantemente.
Tipos de embragues por tipo de presión
Por otro lado, existen distintos tipos de mecanismos de presión para conseguir el acoplamiento de la caja con el motor.
De muelle: en este caso, se encuentran unos pequeños muelles en el disco de embrague que son los que se encargan de realizar la presión.
De diafragma: en este caso se sustituyen los mulles por pequeños diafragmas de acero.
Centrifugo: este tipo de embrague es propio de los coches automáticos. Funciona a través de unos contrapeso que usan la fuerza centrifuga del motor.
Estos son solo algunos de los tipos de embragues que hay, pero cualquiera de nuestros talleres puedes verlos todos.